top of page

Plumas, escándalo y calabozos

Entrevista a Yeda Brown y Suzy Parker


Yeda Brown y Suzy Parker son dos artistas brasileñas que formaron parte de Les Girls, una compañía de revistas que se presentó en Argentina en 1971. A raíz de un artículo que escribió para Moléculas Malucas sobre el grupo, Lucía Cytryn pudo contactarse con ellas para realizarles esta entrevista. Yeda y Suzy se conocieron cerca de 1965 en el maravilloso mundo de la noche carioca. A partir de ese momento, a lo largo de los años, trabajaron en Brasil, Argentina, Uruguay y España. Hoy viven juntas en Río de Janeiro, desde donde nos hablan de su recorrido por el mundo del espectáculo vedette en Brasil y Argentina y de su paso por los cabarets más recónditos que supieron ser una fuente de trabajo para muchas travestis en los primeros años de la década de 1970. Atravesado tanto por el reconocimiento celebratorio como por la sistemática persecución policial que pesó sobre los cuerpos de las minorías sexuales en épocas de dictaduras cívico-militares y Terrorismo de Estado, el recorrido de Suzy y Yeda revela uno de los costados menos conocidos de los circuitos laborales y artísticos que se frecuentaban en los años setenta.



Ensayo de Les Girls 71 en el teatro El Nacional, Buenos Aires, 1971. De izquierda a derecha: Thelma Moreira, Suzy Parker, Carla Bengston, Irá Velázquez, Akiko, Yeda Brown y Carla Pimenta. Fuente: Archivo Suzy Parker.


Por Lucía Cytryn*



¿Cómo fue el ingreso de ambas al mundo del espectáculo?


Yeda: Yo nací en el municipio de Bagé, Rio Grande Do Sul, en la frontera con Uruguay. Mi padre era militar. A los 18 años yo era un gaycito y él, que no lo veía, me obligó a hacer el servicio militar, imagínate. Yo ya tenía un cuerpo muy femenino en un mundo de machos en cuarteles, pero para poder aguantar pensé: voy a interpretar a Juana de Arco, voy a actuar. Entonces esa experiencia fue para mí como una obra de teatro. Tuve que recurrir a eso porque de lo contrario no hubiera podido sobrellevarlo. Yo ya sabía que al terminar quería ir a Río de Janeiro para hacer mi vida. Allí conocí a un señor maravilloso, un pigmalleon muy rico, muy dulce, dueño de una industria de cueros. Él se enamoró de mí y con su apoyo económico pude empezar en Rio a hacer un curso de maquilladora y de peluquera y alquilar un departamento maravilloso donde conocí el ambiente carioca de revista y, de a poco, a las chicas que ya estaban haciendo espectáculo. Algunas trabajaban los lunes en el Teatro Carlos Gomes, como la Suzy Parker y la Ira Velazquez, que eran de Río. En esa época, más o menos en 1968, comencé a hormonarme y cada día que pasaba me sentía mejor. En 1969 empecé a trabajar en espectáculos, y al año siguiente viajé a Belo Horizonte, donde conocí al grupo de Les Girls. Cuando viajamos para Argentina en 1971 con las chicas yo ya vivía como mujer, ya no era más “un chico”, pasaba como mujer, y a veces pensaban que era lesbiana.


Suzy: Yo hice mi entrada al mundo del espectáculo en 1964, en plena dictadura militar. Un día fui a una tienda a comprar un bikini. El hombre que me atendió me dijo que le gustaba mucho mi manera de ser y que tenía ganas de montar una revista, un espectáculo de travestis. Me preguntó si tenía alguna foto vestida de mujer pero yo en aquel entonces no me montaba, todavía vivía con mi madre... Le respondí que solo tenía las fotos que me había sacado en el Carnaval. Al día siguiente le llevé las fotos y luego me citó en la boite Alcatraz, en Copacabana, a una audición con muchas personas para hacer un número musical. Yo nunca había cantado en público, pero aun así pude hacer un número con una versión en portugués de la canción "My heart belongs to daddy" que Marilyn Monroe cantaba en la película "Let's make love”. Yo estaba muy nerviosa y la voz me temblaba. Me dijeron que me tranquilizara, que tenía que pensar que ellos estaban allí para ayudarme y no para perjudicarme. Entonces volví a hacer el número mejor y fui contratada. Así, fue mi debut. Más tarde empecé a tomar hormonas, y a usar ropa femenina las 24 hs del día.



Suzy, ¿y vos cómo llegaste a Les Girls?


Fue en 1966, en San Pablo. Mis amigas, Rogeria, Valeria y Marquesa, habían empezado un tiempo antes que yo en la boite Stop, en Río de Janeiro. Ese grupo debutó con el show International Set y después hicieron Les Girls. Fue un escándalo, un verdadero éxito. Entonces el director artístico, Miguel Carrer, pidió otro espectáculo más de travestis llamado "Río a la noche”,donde actué con Ira Velazquez y con Patricia Eli. Se trataba sobre un galán norteamericano que llegaba a Rio y quería conocer todo lo que había en la noche carioca. Al visitar una boite se encontraba conmigo, que era una cantante que estaba cantando una bossa nova. El papel de Ira era de una azafata del avión en el que viajaba el galán [1]. Ella fue en Buenos Aires y Montevideo la estrella principal de la revista.


Suzy Parker en el camarín del Teatro El Nacional. Buenos Aires, 1971. Fuente: Biblioteca Nacional Mariano Moreno (Argentina). Departamento de Archivos. Fondo Editorial Sarmiento.

¿Y cómo llegaron a viajar a Argentina?


Yeda: Estábamos trabajando en Uruguay, en el Teatro Bonanza, y un empresario que vino a ver el espectáculo le gustó tanto que nos ofreció hacer una prueba para llevarnos a Buenos Aires. Cuando llegamos y vimos esa ciudad nos volvimos locas.



¿Cómo fue el recibimiento del público porteño?


Yeda: Fue un éxito increíble. Imagínate que era plena dictadura militar ¡y nos recibieron de maravilla!, con cariño, respeto y admiración. Primero fue la gran gala en el Rugantino, donde el dictador Agustín Lanusse vio el espectáculo para ver si lo autorizaba. Y él personalmente firmó el permiso para que podamos trabajar en Argentina. Teníamos una libreta del gremio de Variedades. En Rugantino nos fue muy bien y en un momento nuestro representante nos dijo que había tres empresarios interesados: Bim Bam Bum de Chile, el Maipo y El Nacional. Y bueno, ganó Carlos A. Petit de El Nacional, que fue el que ofrecía más plata. En ese teatro conocimos grandes personalidades del espectáculo como Marcos Zucker, Alfredo Barbieri, Norma y Mimí Pons, Moria Casán. Inmediatamente empezamos el show, habían estrenado "Nerón Vuelve" pero no estaba dando el resultado que ellos querían. Entonces decidieron sumar una pequeña obra dentro de la revista: “Ellas son ellos… o no?” Fue impresionante, todo un despliegue. Llegamos al teatro en un camión de bomberos, divinas, maravillosas… y la noche anterior, fotos para la prensa. Unas verdaderas divas. Parecía una noche de los Oscar.


Cabaret Can Can, Buenos Aires, 1973. Fuente: Biblioteca Nacional Mariano Moreno (Argentina). Departamento de Archivos. Fondo Editorial Sarmiento.

Para esa época algunas de ustedes ya vivían como mujeres, ¿cómo veían la situación de represión policial en Argentina por fuera del mundo del espectáculo?


Yeda: Había solo dos o tres de nosotras que se montaban. Pero Akiko, la Suzy y yo ya andábamos como mujeres. La Ira Velazquez era la más "transformista", era la estrella del espectáculo. Sin pechos ni nada. Pero un pedazo de artista y unas piernas impresionantes. Claudia también, un pedazo de artista lo mismo que la Thelma. Más de una vez nos paró la policía, nos preguntaban "¿Qué están haciendo aquí? ¿Son turistas?". Nosotras les respondíamos que éramos artistas y que habíamos venido al país a hacer una prueba para el teatro para interpretar a grandes divas. Pero esto fue antes de nuestro gran debut en El Nacional. Cuando empezamos a actuar ahí ya éramos famosas. Nos paraban en la calle pero para sacarse fotos: éramos “los travestis de El Nacional”. Incluso en el Barco Ciudad de Rosario, anclado en Buenos Aires, recibimos un homenaje con entrega de premios por nuestro show. También éramos invitadas a las discotecas e hicimos un desfile de modas. Y en Buenos Aires nos hicimos de muchas amigas transformistas y travestis, como Graciela Scott, que fue muy amiga nuestra. Muchas travestis que estaban comenzando querían saber qué hormonas usábamos y cuánto tomábamos.


Suzy Parker en Argentina. Fuente: Archivo Suzy Parker.

¿Donde vivieron en Buenos Aires?


Yeda: Primero en el Hotel Jousten en la avenida Corrientes, a pocas cuadras del teatro El Nacional. En otro momento estuvimos en el Hotel Chacabuco... Cuando fuimos contratadas para una temporada en Mar del Plata fue un verdadero escándalo. Llegábamos montadas y el público se agolpaba en la puerta para vernos pasar. Tuvieron que armar cordones policiales para que no se nos tiren encima. Cada noche nos recibían de maravilla. Y el 31 de diciembre de 1971 desfilamos en un coche abierto dando feliz año nuevo a todo el mundo en Mar del Plata. Y esto en plena dictadura.



Recorrieron bastante Argentina.


Yeda: Sí, estuvimos en Santiago del Estero, en Tucumán, en Córdoba. Cada tanto aparecían las de la Liga de las Madres de Familia que no querían que nos presentáramos. Iban a los teatros vestidas de negro para boicotearnos el espectáculo, pero jamás lo lograron. Al contrario, nos dieron más publicidad.

"La gran revista del Tercer Sexo". Programa de Theatron. Buenos Aires, 1973. Fuente: Archivo Suzy Parker.

¿Cuánto tiempo permanecieron en Argentina?


Yeda: Yo me fui en 1974 para Paris, desde Buenos Aires, pero en Ezeiza viví una experiencia horrible. Cuando vieron mi DNI con mi nombre de varón me dijeron que no podía tener el cabello tan largo y me obligaron a que me lo cortara. Yo les supliqué que no, porque lo necesitaba para trabajar en mi espectáculo. Pero no hubo caso. Mis amigas que me fueron a despedir quedaron completamente shockeadas. Esto hizo que se atrasara una hora el vuelo a Paris y cuando entré al avión llorando la gente estaba muy enojada conmigo echándome la culpa. Una azafata tuvo que venir a consolarme, yo no paraba de llorar. Nunca me había pasado algo así en Buenos Aires en todos los años que estuve, fue un momento muy feo.



Después estuviste recorriendo el mundo.


Yeda: Sí, después de Paris me fui a España y ahí fue el verdadero boom. Yo salía de la dictadura argentina y llegaba a la dictadura española, pero faltaban unos meses para que terminara... el general Franco ya estaba muy mal. Terminé mi contrato el 31 de octubre de 1975 con el Carrousel de Paris y al día siguiente viajé a España. A los veinte días murió Franco. Una amiga le había dado mis fotos a Ernesto Baquero, un representante en Barcelona que me esperó en el aeropuerto y de allí me envió directo a Palma de Mallorca para trabajar durante un mes en el teatro Globo Rojo. Ahí fui un verdadero escándalo, yo era "la vedette brasileña” que presentaban como "la única vedette que hizo el servicio militar". Me empezó a ir muy bien. Luego actué en Madrid en otra obra muy exitosa: Madrid Pecado Mortal, una sátira política musical de Antonio Olano. Yo ya estaba operada y en la apertura salíamos todas desnudas. Hice de Marlene Dietrich, de Rita Hayworth. Entre quienes me fueron a ver estaba Salvador Dalí, que le dijo a Antonio "quiero conocer a Yeda Brown". Yo no sabía mucho sobre él, solo que era un artista excéntrico... Lo recuerdo con un tapado de tigre y una novia rara, inteligente, con voz gruesa. Nos hicimos amigos, íbamos juntos a fiestas. Estando con él en Londres conocí a David Bowie, a Culture Club, a Miguel Bosé. A Dalí le gustaba la gente así, especial, excéntrica, ambigua: no le gustaba la gente normal.


A la derecha, Salvador Dalí junto a Yeda Brown en España, 1978. Fuente: Archivo Yeda Brown.

Suzy, vos te quedaste en Argentina hasta 1976, bastante más tiempo que Yeda ¿Cómo las trataron en el resto del país?


Fuera de Buenos Aires tuvimos problemas, claro. En cada lugar que fuimos tuvimos algún problema con la policía, en todas partes nos llevaban detenidas a las comisarías. En General Roca de noche me maquillaba mucho y de día salía a la calle con un postizo castaño y gafas. Nadie me conocía, pasaba tranquila, iba a los comercios de aquí y allá, tranquilamente. Pero la Thelma Moreira no podía salir porque como ella era negra, enseguida la policía la reconocía. Para mí era más fácil. De noche era una rubia, y de día nadie sabía quién era yo. Solo fui detenida una sola vez allí. No recuerdo el nombre de la boite en General Roca, hay muchos nombres que ya no recuerdo. Conocí también a una artista muy famosa, Manon Pigalle, que fue de las primerísimas que aparecieron. También conocí a Vanessa Show, Vanessa Nell, la Graciela Scott, Evelyn, Ana Lúpez ¿conoces a Ana Lúpez? Ella trabajó con nosotras en Can Can y ahora vive en Benidorm también. Cuando nosotras llegamos era bailarín en el teatro El Nacional y después se transformó en Ana Lúpez. Bailaba divinamente bien.



Con tanto revuelo mediático, ¿estuvieron alguna vez en televisión?


Suzy: Sí, claro. Nos filmaron en Lo de Hansen, mientras hacíamos un desfile. Y fuimos citadas también para el programa de Mirtha Legrand, pero no llegamos a hacerlo, fíjate tú, mi estrella favorita. Con ella tengo fotos en Mar del Plata. Pero a mí no me gustaban los reportajes. Siempre me escapé de los periodistas.



"La Revista Sudamericana de Travestis". Programa del Cabaret V.I.P, de Bahía Blanca. Fuente: Archivo Suzy Parker.

¿Cuándo llegaban a los pueblos o las ciudades de las distintas provincias de Argentina, ya las conocían?


Suzy: Claro, nos conocían muy bien. Las familias, los hombres hacían fila para entrar al cabaret a ver nuestro show. En Neuquén, en 1975, tuvimos algunos problemas y nos dieron 48 horas para salir de la ciudad. Hasta tuve que ir a buscar a Safo (una vedette travesti chilena que se presentaba con nosotras) y a la Thelma a la comisaría. Al llegar le dije al policía, "somos artistas y nos comportamos como tales". También nos atacó un cura y yo me presenté en su casa a golpearle la ventana para hablar con él. Nosotras a la noche salíamos con chicos de la ciudad, ¡ah, para qué! Cuando se enteraron sus madres que ellos estaban con “los travestis brasileños” cayó la policía al hotel y nos llevó a todas detenidas. Uno de los agentes nos dijo: "no sé por qué ustedes están acá... si fuera por mí las dejaría salir. Pero tenemos que cumplir porque las madres de familia son católicas y no podemos ir contra ellas". Pero la verdad es que ahí nos trataron bien, por suerte nunca nos detuvieron en calabozos junto a los hombres detenidos, siempre nos alojaron separadas. Pero en Bahía Blanca, también en 1975, tuvimos grandes con la policía. Es una ciudad muy militar, muy conservadora, en la que nos quedamos por varios meses. Trabajamos en el Bohemia Club, un cabaret que se llenaba de gente. Ahí también fuimos detenidas. El dueño del Cabaret Diávolo, que era el rival del nuestro (ahí actuaba nuestra amiga Evelyn), nos denunció a la policía. Éramos varias, un grupo maravilloso: Gabriela Grenat, la Thelma, Safo, Assúcar, Mónica, Sandra Matera y yo, todas presas, quedamos 15 días detenidas. Algunas salieron antes.


De izquierda a derecha, arriba: Marilyn, de Argentina; la chilena Safo, y Thelma. Abajo: la cubana Assúcar y Suzy Parker. Cabaret V.I.P, Bahía Blanca, 1975. Fuente: Archivo Suzy Parker.

¿Y con que motivo las llevaban? ¿Por contravenciones?


Suzy: Por escándalo en la vía pública y por usar ropa del “sexo opuesto”. Esos artículos contravencionales los usaban contra nosotras. A mí me pasó que mientras me estaba arreglando y montando en el camarín para hacer mi segundo número, irrumpió la policía, me agarraron del brazo y me dijeron "nos tiene que acompañar". Y yo les dije "No, de ninguna manera, yo no voy a ningún lugar, ¿no están viendo que estoy saliendo para el escenario?" Me llevaron igual, y al llegar a la comisaría me sacaron los anillos que me había regalado mi gran amor brasileño y me dijeron "el día que te vayas, te devolvemos todo". Por supuesto que no me devolvieron nada. Nos colocaron primero en un calabozo de cemento, horrible y más tarde nos pasaron a una sala que tenía una puerta con una ventanilla. Un día veo que un policía miraba para adentro, donde estábamos nosotras. ¡Era uno de mis amantes! Salía conmigo y yo no sabía que era policía. Se ve que hablo con alguien porque fuimos bien tratadas. Cuando la señora de la peluquería donde nos hacíamos las manos supo que estábamos detenidas enloqueció totalmente y se presentó en la comisaría a discutir con el comisario, fue un escándalo total. Esta mujer nos quería de verdad, nos llevaba comida a la comisaría junto con Carlos, un gaycito que trabajaba en la boite con nosotras. La señora venía con su marido y con su hermana a traernos comida, colchones y sábanas limpias. No nos faltó nunca nada, parece mentira. Cuando pasaron 15 días nos liberaron y fuimos unos días a la casa de ella y su marido. En otra oportunidad, un sábado a la noche, fuimos al cine con la Thelma a ver una película de John Travolta. No sé cómo pero la policía se enteró que nosotras estábamos ahí. El iluminador se nos acercó y nos dijo "disculpen, afuera está la policía esperándolas". También me detuvieron cuando iba con un hombre a un hotel. Nos siguieron en el auto y nos llevaron a la comisaría. El comisario no podía creer que yo fuera travesti, me decía "¿Cómo puede llamarse Juan Carlos si es una mujer?". Otros decían, "¡no, es un travesti, no es una mujer!", "no, no, es una mujer, ¿no le ve los senos, la cara, el pelo?", "bueno, sáquenle la blusa para ver si es o no es una mujer". Me hicieron desnudar. ¡Ah! el comisario pegó un salto y golpeó la mesa ¡"en años de ser comisario jamás me paso una cosa así!", dijo. Se ve que nunca había visto una travesti en la vida. Después me iban a llevar a otra comisaría y en el patrullero me dicen “tiene la cara muy de mujer todavía”, y me dibujaron un bigote... Cuando llegaron a la plaza principal, cerca del hotel donde yo vivía, me liberaron. Pero tuve que salir de la ciudad. Es que estábamos fichadas, a cualquier lugar que íbamos nos fichaban. En Buenos Aires también, en todos lados. A donde pasábamos nos fichaban. Y así fuimos viajando, recorriendo Argentina con la Thelma. Llegábamos a los lugares y pedíamos trabajo en los cabarets.


Yeda en el cabaret Can Can, Buenos Aires, 1973. Fuente: Biblioteca Nacional Mariano Moreno (Argentina). Departamento de Archivos. Fondo Editorial Sarmiento.


¿Durante estos años que estuviste en el país, el panorama de la represión iba cambiando a medida que asumían los nuevos gobiernos?


Suzy: No, siempre era más o menos la misma cosa. Solo en 1971 que teníamos el permiso de Lanusse estuvimos más tranquilas. Pero yo me fui quedando en Argentina y los papeles con ese permiso ya no me servían, a partir del 73 quedamos completamente fuera de regulación.



¿Por qué decidiste dejar Argentina?


Suzy: Fue en 1975, en los últimos meses de María Estela Martínez de Perón. Yo estaba de vuelta en Buenos Aires, y el hombre del hotel donde vivía me dijo: "Suzy, la cosa se va a poner fea aquí. Hay una guerra civil, va a haber tanques de guerra en la calle. Hay que comprar comida y amotinarse en la casa, ya no se puede salir a la calle", me dijo. Y yo pensé "No, entonces me voy. No voy soportar una cosa así”. Estaba muy asustada, y resolví volver. Me presenté en el consulado de Brasil y ahí no me pudieron ayudar. En ese entonces yo trabajaba en Can Can y salía con un hombre que (yo no sabía) trabajaba en la Casa Rosada. Cuando le dije que me quería volver a Brasil, me consiguió los papeles.



Te fuiste justo cuando estaba por empezar la dictadura militar de Videla.


Suzy: Sí. Estuve cinco años en Argentina, del 71 al 76. No quería irme, me volví con el corazón amargado, fue muy triste. Pero bueno, tuve que hacerlo, no había otra opción. Después estuve un poquito en Brasil, hasta el año 80, que me marché para Barcelona.



Yeda, Ira, Thelma, todas las de ese grupo siguen siendo amigas hasta el día de hoy.


Suzy: Sí, claro. Ira actualmente está retirada y vive en España, en Benidorm. Y la Thelma Moreira vive con su marido en Hamburgo. Somos cuatro las que quedamos vivas: la Yeda, la Ira, la Thelma y yo. Todas conservamos la amistad. Estuvimos juntas, trabajamos juntas, vivimos juntas. Hicimos todo juntas.


Yeda y Suzy. Benidorm, España, década de 1980. Fuente: Archivo Yeda Brown.


* Lucía Cytryn es Licenciada en Letras de la UBA y Maestranda en Estudios y Políticas de Género de la Untref. Trabaja como investigadora en la Biblioteca Nacional Mariano Moreno; actualmente, está investigando el Archivo de Redacción de Crónica. Participa del proyecto “Archivo y diagrama de lo viviente” con sede en el Programa de Estudios Latinoamericanos Contemporáneos y Comparados (PELCC) y del Proyecto "Archivos en transición: memorias colectivas y usos subalternos" (Trans.Arch).



Nota al pie


[1] Les Girls fue, en 1965, el nombre de una obra que se montó en la boite Stop con algunas de las artistas que Suzy menciona. Alrededor de 1967, el elenco original se disolvió y Les Girls pasó a ser el nombre del grupo, del que formarían parte Suzy, Yeda, Ira Velazquez, Akiko, Claudia Pimenta y Thelma Moreira, el grupo que se presentó en Argentina. Sin embargo, como explican Suzy y Yeda, todas ellas se conocían del mismo circuito de la noche brasileña.



Agradecimientos


A Yeda Brown, a Suzy Parker y al amigo de ambas, Paulo Vitor Guedes, gracias a quien pude ponerme en contacto directo con ellas. A Luiz Morando y a Moléculas Malucas por el inmenso trabajo de edición.




AVISO SOBRE REPRODUCCIÓN Los trabajos publicados en Moléculas Malucas, así como las imágenes que los acompañan, solo pueden reproducirse con nuestra previa autorización y la de sus autor*s, personas entrevistadas, titulares de derechos de autor, traductor*s o archivos que custodian los materiales reproducidos junto a los artículos. En caso de precisar mayor información pueden escribir a archivomoleculasmalucas@gmail.com



Cómo citar este trabajo


Cytryn, Lucía. Plumas, escándalo y calabozos. Entrevista a Yeda Brown y Suzy Parker.

Moléculas Malucas, marzo de 2022

https://www.moleculasmalucas.com/post/plumas-escandalo-y-calabozos

bottom of page